Belka y Strelka: Los primeros perros espaciales que regresaron vivos
Hace sesenta y cinco años, el 19 de agosto de 1960, dos pioneros peludos del espacio —dos perros callejeros llamados Belka y Strelka— despegaron a bordo de la nave soviética Sputnik 5. Se convirtieron en los primeros seres vivos en realizar un vuelo orbital y regresar sanos y salvos. En este artículo conmemoramos a estos animales extraordinarios y revelamos datos fascinantes sobre su viaje al espacio.
Contenido
- Historia de los perros espaciales
- El vuelo de Belka y Strelka: perros callejeros en el espacio
- Un pequeño paso para la perrera: el exitoso final de la misión de Belka y Strelka
- F.A.Q.
- Patas hacia las estrellas: el legado de los perros que abrieron el cosmos
Historia de los perros espaciales

Desde principios de la década de 1950, los soviéticos enviaban perros al espacio como pilotos de prueba vivos para estudiar cómo reacciona el cuerpo a condiciones extremas como la ingravidez y las fuerzas G. ¿Por qué perros? Porque eran pequeños, resistentes y, en el caso de los callejeros, ya estaban acostumbrados a entornos duros.
La más famosa de estas pioneras fue Laika en 1957, el primer animal en orbitar la Tierra. Lamentablemente, Laika no sobrevivió —un capítulo triste en la historia de la exploración espacial—. Pero pasemos a una historia más alentadora.
Más tarde, en 1957, bajo la dirección del diseñador jefe soviético Serguéi Koroliov, los científicos seleccionaron 12 perros callejeros y comenzaron a entrenarlos para futuros vuelos espaciales. El nuevo objetivo: demostrar que podían enviar un ser vivo a la órbita y traerlo de vuelta con vida. Las sesiones de entrenamiento intensivas tomaron varios meses; los perros estaban entrenados para vivir en los espacios confinados, aguantar una aceleración extrema y comer los alimentos de tipo gelatina que fueron entregados por un distribuidor automático. Durante el proceso los especialistas de capacitación desarrollaron relaciones estrechas con los perros y llegaron a conocerlos muy bien.
Belka (“blanquita”) y Strelka (“flechita”), las perras hembras de 2,5 años, fueron entre los perros que desempeñaron su papel perfectamente en la capacitación. Fueron seleccionadas para realizar un vuelo de 1 día alrededor de la Tierra en la nave espacial Sputnik-5.
El vuelo de Belka y Strelka: perros callejeros en el espacio

El 19 de agosto de 1960 Sputnik-5 con dos perras a bordo fue lanzado desde el Cosmódromo de Baikonur. Durante el lanzamiento el pulso de las perritas y su frecuencia respiratoria aumentaron, pero cuando la nave espacial alcanzó la órbita de la Tierra Belka y Strelka se calmaron lentamente. La condición de las “perras astronautas” fue controlada y analizada por unos dispositivos especiales que medían la presión arterial, el ritmo cardíaco, la actividad cerebral y muchos otros parámetros. Todo esto se hizo para proteger a las perritas y aprender cómo las tensiones del vuelo espacial podrían afectar a seres humanos. La nave espacial estaba equipada con una cámara de televisión que enviaba imágenes de las perras a la Tierra.
¿Quieres ver imágenes reales de Belka y Strelka en acción? Mira nuestro video aquí.
A propósito, Belka y Strelka no estaban solas en su cápsula. Sputnik-5 llevaba ratones, insectos, plantas, semillas, hongos y microbios también.
En definitiva, el vuelo estuvo bastante bien. Después de las tensiones del lanzamiento las perras estaban tranquilos la mayor parte del tiempo y disfrutaron de su comida. Según los sistemas de control, la exposición a la ingravidez no les molestó tampoco. Sólo había un momento inquietante (después de que la nave giró alrededor de la Tierra por cuarta vez) en el que Belka de pronto se puso muy ansiosa y comenzó a ladrar – se sintió mal por alguna razón desconocida. Debido a este accidente los científicos decidieron limitar el vuelo de Yuri Gagarin – el primer ser humano en el espacio – con sólo una vuelta alrededor de la Tierra.
Un pequeño paso para la perrera: el exitoso final de la misión de Belka y Strelka
El 20 de agosto de 1960 Sputnik-5 aterrizó con éxito después de orbitar 17 veces alrededor de la Tierra. Belka y Strelka pasaron más de 25 horas en el espacio y cubrieron una distancia de 700 mil kilómetros. Después del aterrizaje las perritas se sintieron bastante bien; las pruebas médicas no mostraron anomalías tampoco. Por lo tanto, Belka y Strelka se convirtieron en los primeros seres vivos que habían sobrevivido un vuelo orbital.
Varios meses después del vuelo, Strelka dio a la luz a 6 cachorros sanos. Una de ellos llamada Pushinka (“La Esponjosa”) fue entregada como un regalo al Presidente de los Estados Unidos John Kennedy. Después de su llegada a los Estados Unidos Pushinka se estableció en la Casa Blanca y dentro de poco tuvo cachorros con un terrier galés Charlie que también vivía con la familia Kennedy. Estos cachorros fueron apodados “pupniks” como una referencia a su madre soviética.

F.A.Q.
¿Cuál fue el primer animal en el espacio?
Los primeros animales en el espacio fueron moscas de la fruta, enviadas por Estados Unidos en un cohete V-2 en 1947 para estudiar los efectos de la radiación a gran altitud. Fueron los auténticos pioneros antes de que les siguieran animales más grandes. ¿Quieres poner a prueba tus conocimientos espaciales? Haz nuestro quiz sobre los primeros en el espacio y descubre quién abrió el camino hacia el cosmos.

¿Fueron Belka y Strelka los primeros perros en el espacio?
No, Belka y Strelka no fueron los primeros perros en el espacio, pero sí los primeros en orbitar la Tierra y regresar con vida. Los primeros fueron Dezik y Tsygan, dos callejeros de Moscú lanzados por la URSS el 22 de julio de 1951. Más tarde, en 1957, Laika se convirtió en la primera perra en orbitar la Tierra, pero su misión no estaba diseñada para sobrevivir.
¿Cuál fue el primer gato en el espacio?
El primer (y único) gato en el espacio fue Félicette, una gata callejera francesa lanzada en 1963. Viajó en un vuelo suborbital, sobrevivió a la misión y aportó valiosos datos sobre la actividad cerebral durante el viaje espacial. Sin embargo, su destino posterior fue triste. Lee nuestro artículo para saber más sobre el primer gato en el espacio.
¿Qué otros animales han viajado al espacio?
Muchos animales han viajado al espacio, incluidos:
- Monos (por ejemplo, Albert II, el primer primate en el espacio)
- Perros (Laika, Belka, Strelka y muchos más, principalmente de la URSS)
- El gato Félicette
- Tortugas (los soviéticos incluso enviaron algunas a la órbita lunar)
- Insectos (moscas de la fruta, arañas, abejas)
- Peces y medusas
- Ratones, ratas, conejos y ranas
Estas misiones ayudaron a los científicos a comprender cómo reaccionan los organismos vivos a la microgravedad y a las condiciones espaciales.
¿Era necesaria la experimentación con animales en la carrera espacial?
Aunque hoy es controvertida, la experimentación con animales fue clave en los primeros años de la exploración espacial. Permitió estudiar cómo afectaba el vuelo espacial a los cuerpos vivos antes de arriesgar vidas humanas. Los datos obtenidos —frecuencia cardíaca, respiración, condiciones de supervivencia— fueron esenciales para diseñar protocolos seguros para astronautas.
Patas hacia las estrellas: el legado de los perros que abrieron el cosmos
Tras su misión histórica, Belka y Strelka vivieron en un centro de investigación soviético, cuidados y venerados como tesoros nacionales. Su historia conquistó corazones en todo el mundo y dejó una huella duradera en nuestro conocimiento del espacio.
Aunque sus logros no sean tan famosos como los de Yuri Gagarin o Neil Armstrong, estos valientes perros demostraron algo igualmente crucial: que la vida podía soportar las duras condiciones del espacio y regresar con vida. Su vuelo no solo hizo historia, sino que abrió el camino para los viajes espaciales humanos y recordó al mundo que los héroes también caminan en cuatro patas.